domingo, 22 de septiembre de 2013

RESPUESTA A UN DISCREPANTE RESPETUOSO

             
         La Iglesia llora 

Como digo a muchos que me escriben, no es molestia que usted me refute, sino que por el contrario también me da pie para construir mis trabajos. Por tanto no se preocupe con la contradicción, porque viniendo como la suya con respeto y educación no es nada que me contraríe. Además yo no tengo la respuesta para todo ¿Quién la tiene? Así pues gracias por su mensaje.

No sé que tiene lo que escribo que levanta ronchas por todo lugar, cuando estoy convencido de que lo que escribo es para todos. No creo que con hacer patente algo que todos o casi todos percibimos, sea motivo para tacharme de tipo esclerotizado o liberal. Ni lo uno ni lo otro.

Queremos seguir a Jesús, porque nos parece que Él es el verdadero camino como dijo: Yo soy EL camino, LA verdad, y LA vida. A lo largo de mis años lo he comprobado experimentalmente, y lo aconsejo a TODOS los que en dudas y discusiones andan confusos o con mala conciencia.

Por mucho que queramos, no vamos a convencer al actual Papa de las cosas que dicen de él los seguidores de Lefrevbre, entre los que se emiten los calificativos más denigrantes contra un Papa. Porque si lo dijeran de mí, al ser un pigmeo en estas lides, es más o menos soportable. Uno más. Pero que los mismos que se alzan con el nombre de católicos y se consideran los únicos fieles, el caso es ya más peliagudo.

No entiendo mucho de liturgias y he contemplado muchas. No quiero entrar en ese callejón, que aun a los más avispados ha inquietado y exaspera a veces. Yo prefiero andar prudentemente con todos, sin que estas discrepancias me afecten, y para todos tengo comprensión de sus razones. Parecerá que soy ecléctico, y que trato de conciliar lo que es y lo que no es. Pues ¡que le voy a hacer!

Solamente procuro examinarlo todo y retener lo bueno. Porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia y paz y gozo en el Espíritu Santo. Herejes por causa de cómo ha de hacerse el ritual de la misa, u otras cosas concomitantes o similares en otras confesiones y en otros lugares no es de recibo. Sobre todo ignorar un magisterio de siglos ejercido y reconocido.


AMDG. 

EL SEÑOR ABORRECE POR COMPLETO:



LO QUE EL SEÑOR ABORRECE...

«Hay seis cosas, y hasta siete, que el Señor aborrece POR COMPLETO:

Los OJOS altaneros.

La LENGUA mentirosa.

Las MANOS que asesinan a gente inocente.

La MENTE que elabora planes perversos.

Los PIES que corren ansiosos al mal.

El TESTIGO falso y mentiroso.

y el que PROVOCA PELEAS entre hermanos. »


GUARDAOS DE LA AVARICIA.