miércoles, 1 de mayo de 2013

PIEDAD ACOMPAÑADA DE CONTENTAMIENTO




PIEDAD ACOMPAÑADA DE CONTENTAMIENTO
Quiero dejar hablar a la Santa Escritura


 Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad,
 está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas,

 disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia;    
apártate de los tales.

Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;
 porque nada hemos traído a este mundo,
y sin duda nada podremos sacar.

 Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.
 Porque los que quieren enriquecerse
 caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas,
que hunden a los hombres en destrucción y perdición;

porque raíz de todos los males es el amor al dinero,
 el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe,
y fueron traspasados de muchos dolores
(1ª Timoteo 6: 3 al 10).
El Papa Francisco (menos mal que no le decimos, Paco aun) ha dicho, según los medios de comunicación, unas verdades que son archiconocidas y que cualquier niño de la escuela dominical puede conocer y memorizar. Creo que por fin se puede decir algo fuertecillo ya que viene respaldado por el Papa. No habría de ser así porque Jesús nuestro Señor y foco de nuestra vida lo dijo claramente… Si mí nada podéis hacer y para remachar dejó otro dicho más concreto aun: Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. (Juan 10:9)
Estas palabras que resuenan en el corazón de los cristianos que realmente han abierto a Cristo su corazón han sido ignoradas cuando no manipuladas por muchos farsantes que se apropian de la gloria de Jesús para hacer negocio de ella, siendo lobos y no ovejas del Señor. Y así decía Pablo apóstol: A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.
 Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna. (1ª Timoteo 6:17 al 19)

No seamos como Midas que todo lo que tocaba se convertía en oro y así no podía tocar ni los alimentos porque tan pronto como tomaban contacto con él se tornaban oro. Y el oro no se puede comer. El Papa ha dicho lo que siempre hemos dicho algunos sobre la realidad del mundo, y lo que a la Iglesia cristiana le corresponde hacer para mostrarse fiel y leal a su cabeza y fundador, esto es, Jesucristo.

Es muy satisfactorio que sea un hombre de la notoriedad y decisión que muestra el Papa, el que regrese otra vez a la simplicidad que es en Cristo Jesús, y respalde lo que siempre ha estado en el corazón de tantos y tantos cristianos.

AMDG