sábado, 26 de febrero de 2011

LAS GENTES Y EL ESPÍRITU

La gente por lo general (hay muchas excepciones) solo quiere “bellotas intelectuales” como es natural en personas poco instruidas contra sus intereses, y como resultado muy dependientes de las luces mundanas, por lo que es bobería darles tarta espiritual. El mismo Jesús decía: No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, y se vuelvan y os despedacen. (Mateo 7:6) Y El sabía lo que decía. No se trata de no evangelizar por supuesto, sino no insistir sobre los que solo buscan altercar y molestar.

Las cadenas son NEGOCIOS y donde hay negocio puede haber o hay, corrupción y partidismo que se trasluce según la paga (excepciones puede haber), aunque sea por períodos o momentos estelares. Hay he visto un semanario de Granada que es una penita pena. Pero eso comen las masas, y eso creen. El que no cree en Dios y en su justicia lo cree todo porque no quiere discernir, ni tampoco puede. (1ª Corintios 2:14)

Y cuando hablo de masas no quiero decir como los rabinos “el pueblo de la tierra” despreciativamente sino lo que resulta de una educación tan deficitaria, y una moral relajada y en franca oposición ante Dios. Las gentes, pobres de ellas, bastante tienen con arrastrar esta injusticia como buenamente pueden.

No ha sido preparado nada más que en sus necesidades primarias. La tele y los demás medios le atraen casi totalmente, porque le dan la sopita hecha y adobada convenientemente. He servido en empresas grandes, y cuando me sentaba en un consejo de dirección, me avergonzaba de mí mismo por tener alguna participación en aquello. Me ponían los pelos de punta. Y si te vas a los sindicatos y otras gracias más, se te ponen como escarpias de los raíles del tren.

La humanidad solo tiene un camino de redención, y esta pasa por Dios y sus consejos, que en mi ya larga vida he visto que es lo único que da paz y perspectiva. Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi senda. (Salmo 119:105) Solo por ese camino se puede comprender y percatarse, de que las gentes, fatalmente, son dirigidas a su perdición por el enemigo declarado de la humanidad.

Que estas cosas parezcan a algunos exageraciones o mitos, es cosa que no me preocupa, porque ideologías hay muchas, más Cristo solo hay uno. A medida que la técnica (más que la moral) avanza, se demuestra que lo que la filosofía intuye, y la lógica establece, la tecnología nos lo lleva a descubrir. Más misterios de la naturaleza y del Universo entero, corroboran lo que algo rústicamente (como correspondía a los tiempos de más limitación de conocimiento físico) se decía con toda elegancia y acierto.

Si se hace un repaso mental, se revalida que la doctrina del Cristo y las Santas Escrituras, es perfecta y no hay fallas, como no sean de la deficiencias en traducción, interpretación, o malevolencia. Y así dice la Santa Escritura: La ley de Yahvé es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Yahvé es fiel, que hace sabio al sencillo. (Salmo 19:7) Si alguien cree que está libre de las desventuras de la vida está aviado. A todos les ocurre un mismo suceso.

Y así dice la Escritura: Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad. (Eclesiastés 3:19) Así son las cosas, tan innegables y ciertas.

Rafael Marañón 26 de Febrero de 2011-02-10
AMDG

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